Aquellos que hayan osado desafiar a la naturaleza en «Expedition Everest», la espectacular aventura de Animal Kingdom, se habrán topado con el Yeti: una bestia mitológica de 25 pies de altura que habita – según cuenta la leyenda – en las cumbres nevadas de esta cordillera himalaya.
Lamentablemente, como muchos intrépidos viajeros han podido comprobar en primera persona, el Yeti lleva aproximadamente un año sin funcionar correctamente y los ingenieros de Disney no tienen claro cómo resucitarlo para lograr el efecto deseado.
Esta complicada figura robótica, una de las más complejas que ha diseñado y construido el prestigioso equipo de Imagineers de Disney, carece actualmente del movimiento que debiera y simplemente está iluminada por unas luces que dan la sensación de movimiento.
Los aficionados a esta atracción han llegado a crear un grupo en Facebook para reclamar la vuelta a la vida del Yeti, ya que desde su punto de vista si éste no se mueve todo el meticuloso detalle y realismo de esta atracción queda frustrado.
Si bien portavoces de Disney han reconocido en varias ocasiones que el Yeti no funciona correctamente, tampoco han comunicado de forma oficial cuándo estará reparado. Según una teoría popular, la fuerza con la que el Yeti descargaba su gigantesco brazo a escasos centímetros de los visitantes ejerció tanta presión sobre la base de la figura que impidió su movimiento.
Veremos cuánto tardan en solucionarlo, pero seguro que el resultado es fabuloso.
